La condensación en las ventanas es un problema bastante frecuente, sobre todo en invierno. ¿Cómo se puede solucionar este problema de manera definitiva?
En Madrid, muchos edificios tienen ventanas antiguas que no aíslan correctamente de los ruidos y la temperatura exterior. Como consecuencia, las ventanas “sudan” y se genera un ambiente más húmedo en las viviendas.
Hay varias acciones que podemos poner en marcha para evitar que esto ocurra en nuestros hogares. Quédate y te contamos qué puedes hacer para evitar la condensación en las ventanas.
¿Por qué es importante evitar la humedad en las ventanas?
Más allá de lo incómodo que puede resultar tener las ventanas mojadas cada mañana, la humedad en las ventanas puede tener consecuencias muy negativas. Entre ellas están las siguientes:
- Aparición de humedades en la pared alrededor de las ventanas.
- Aparición de moho en las paredes y en las propias ventanas.
- Caída de la humedad al suelo, afectando a los pavimentos, especialmente si son de madera.
- Filtraciones de humedad a los cimientos del edificio, dañando su estructura.
Estas consecuencias no solamente son negativas para tu casa, sino también para tu salud. Por eso, es importante que le pongas solución a la condensación de las ventanas cuanto antes.
¿Qué produce la condensación?
Para saber cómo eliminar un problema, es necesario saber por qué se produce.
En primer lugar, es necesario entender que la condensación solamente se produce si hay un ambiente demasiado húmedo en la vivienda y la temperatura ha bajado. De ahí que sea más frecuente en invierno.
Las ventanas antiguas, que no aíslan correctamente de la temperatura exterior, suelen ser uno de los principales motivos de la condensación en los cristales.
¿Cómo puedo evitar que las ventanas lloren?
Cuando ya sabemos por qué se produce la humedad en las ventanas y vemos que uno de los principales motivos es el tipo de ventana, es normal pensar en cambiarlas.
Por eso, muchas personas se preguntan cuánto cuesta cambiar a unas ventanas climalit, u otra marca de tecnología similar. La respuesta es entre 250 € y 300 € por metro cuadrado.
Sin embargo, cambiar las ventanas es la opción más drástica y no siempre es necesario llegar a esos extremos. Puede que tus ventanas suden porque no estás poniendo en práctica alguno de los consejos que te vamos a dar a continuación.
Controlar la temperatura
Es importante que la temperatura de la casa sea templada. Si hace demasiado frío, tendremos que encender la calefacción y, si hace demasiado calor, será importante abrir un poco las ventanas.
La idea es que la casa no baje de los 17 grados centígrados.
Ventilar todos los días
Aunque haga frío, es importante que durante al menos 5 o 10 minutos al día, ventilemos la casa. Las corrientes de aire purifican el ambiente y hacen que la humedad relativa se mantenga en niveles saludables.
Otras recomendaciones
Además de las que hemos mencionado, hay otras acciones que puedes emprender para evitar la condensación de las ventanas.
Evitar cerrar cortinas o persianas
Si cierras las cortinas o las persianas, evitarás que el aire circule alrededor de los cristales y será más probable que se produzca condensación.
Utilizar deshumidificadores y extractores
Los deshumidificadores y extractores se encargan de ayudarnos a eliminar la humedad sobrante de nuestros hogares, reduciendo las probabilidades de que se condense el aire en los cristales.
Pintar las paredes con pintura anticondensación
Si la humedad ha pasado a las paredes o si también están siendo víctimas de la condensación, lo mejor es pintarlas con una pintura anticondensación. Este tipo de pintura aísla, haciendo que se reduzca el efecto de pared fría y, por tanto, la condensación.
Cambiar las ventanas
Si todas estas acciones no te han ayudado a evitar la condensación en tus ventanas, entonces ha llegado el momento de hacer un cambio.
Estas son las características que deben tener tus ventanas para reducir las probabilidades de sufrir condensación:
- Múltiple acristalamiento, que mejorará las condiciones térmicas de la vivienda.
- Rotura del puente térmico, que evitará las fugas de temperatura y la condensación ya que aíslan la perfilería de la ventana.
Evitar los marcos metálicos, como por ejemplo los de aluminio, y optar mejor por marcos de PVC, o similar.
Esperamos que estos consejos te ayuden a evitar la condensación de las ventanas. Como ves, antes de recurrir al cambio drástico, hay muchas acciones que puedes llevar a cabo para ponerle solución a este problema.
