Estás pensando en comprar un piso en Madrid y ves un anuncio que dice: “Se vende nuda propiedad”. Si no sabes qué es la nuda propiedad ni el usufructo y cuáles son los aspectos que caracterizan a ambos términos, no te preocupes.
En el artículo de hoy, desde Grupo Inmobiliario Ares – Tu Boutique Inmobiliaria, vamos a analizar qué es la nuda propiedad, cuándo es común encontrarla y en qué se diferencia del usufructo de una propiedad.
¿Qué es la nuda propiedad?
La nuda propiedad es la posesión de un bien sin tener el derecho al uso y disfrute del mismo. Estos derechos pertenecen a un tercero, y es lo que se conoce como usufructo.
Por tanto, el poseedor de la propiedad o “dueño” es el nudo propietario. Sin embargo, sus derechos sobre el mismo están limitados, ya que no disfruta de la propiedad.
¿Cuándo ocurre la nuda propiedad?
Cada vez es más común encontrar propietarios que venden la nuda propiedad de su vivienda y se quedan, o reservan, el usufructo de la misma.
Suele ser muy habitual en personas mayores, sobre todo en aquellos sin herederos. Este proceso de venta les permite capitalizarse sin perder la posibilidad de permanecer en la vivienda, generalmente de forma vitalicia.
El concepto de nuda propiedad también es muy empleado en el ámbito de las sucesiones. Con este derecho, pueden dar en herencia la vivienda sin perder el usufructo de la misma.
Diferencias entre nuda propiedad y usufructo
Como hemos visto, existe una diferencia muy marcada entre el usufructo de una vivienda y la nuda propiedad. Las principales diferencias que podemos encontrar entre ambos derechos son:
Por un lado, los derechos del usufructuario son:
- Disfrutar del uso de la vivienda, aunque no sea el propietario.
- Podrá seguir disfrutando de su uso mientras dura el plazo establecido (ya sea por un plazo determinado o finalización por fallecimiento).
- Alquilar la vivienda para obtener una renta.
- Vender el usufructo a un tercero, como por ejemplo el nudo propietario.
Por su lado, los derechos del nudo propietario son:
- La vivienda es de su propiedad.
- Podrá disfrutar del uso de la vivienda cuando finalice el plazo del usufructo.
- Puede vender la nuda propiedad a un tercero, aunque no alquilarla.
En definitiva, aunque el nudo propietario es el dueño de la vivienda, goza de muy pocos privilegios y, por ello, se dice que tiene una “propiedad desnuda”.
Vender nuda propiedad
Como vimos al principio del artículo, cada vez es más común la compraventa de propiedades en esta modalidad.
Es muy común, sobre todo, en personas mayores que quieren seguir disfrutando de su vivienda hasta su fallecimiento y, a la vez, tener unos ingresos que les permitan vivir.
Cuando la persona mayor no tiene herederos, esta forma de venta puede garantizar los ingresos que necesita para vivir, mientras mantiene el uso y disfrute de su vivienda habitual.
Pero, además, es muy frecuente este tipo de venta de padres a hijos. Los hijos, en lugar de heredar la propiedad, la compran cuando su padre sigue vivo.
Con esta modalidad, no solamente puedes seguir disfrutando de tu hogar y ganar dinero por él, sino que también dejarás de pagar los gastos de tener una vivienda en propiedad: derramas, comunidad, IBI…
¿Cuándo es interesante comprar la nuda propiedad?
Comprar el derecho a ser el nudo propietario de una vivienda cada vez resulta más interesante como inversión.
Aunque no podrás hacer uso del inmueble hasta que haya transcurrido un tiempo, es una opción atractiva porque te permite tener una vivienda en propiedad por debajo del valor de mercado. Por tanto, obtendrás una mayor rentabilidad una vez que puedas venderla.
A continuación te dejamos un video en el que se explica mejor esta opción de inversión.
Esperamos que, después de leer este artículo, entiendas a la perfección qué es la nuda propiedad y en qué se diferencia del usufructo.
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